La ruta del Tannat – Uruguay
La Ruta del Vino uruguaya nos brinda la posibilidad de recorrer muy buenas bodegas y la posibilidad de degustar vinos premiados en concursos internacionales.
Con el fin de incentivar esta actividad hace cuatro años se formó la Asociación de Turismo Etiológico en este país, la misma está integrada por 15 bodegas. Mediante esta ruta es posible seguir los pasos del Tanta. El Tanta es una cepa de uvas muy característica del Uruguay. Una uva tinta, rústica, de maduración tardía y con una fuerte ‘personalidad’.
Las bodegas nos invitan a realizar los clásicos recorridos entre barricas, toneles y viñedos con la degustación final. A pesar de ser una ruta nueva ya le valió el reconocimiento del suplemento Viajes de The New York Times.
Las bodegas que podemos visitar se abocaron a la creación de vinos de gran calidad, y se han convertido en referentes internacionales. La mayoría de ellas exporta a Brasil, Estados Unidos y Canadá.
La tanta al principio no es una ceta fácil de obtener, por la estructura con la que cuenta puede ser considerada una uva versátil que permite producir vinos jóvenes, de guarda y hasta licores como el Oporto.
En Uruguay existen 268 bodegas, la mayoría pequeñas y con una importante tradición familiar. Todas ellas se encuentran atendidas por su dueños de años de campo, concentradas es las cercanías de Montevideo y Canelones, pero también a lo largo del río Uruguay, en Colonia y en Rocha. Si bien es cierto que aun no se encuentran muy influenciadas por lo que al marketing se refiere poco a poco se van desestructurando. Un claro ejemplo de ello es la Bodega Irurtia en Carmelo, ella se encarga de recibir a los turistas con gran esmero. Les gusta darles la posibilidad a los visitantes de conocer el lugar.
Por su parte, Juanico, en Canelones es una de las bodegas líderes. Entre sus producciones se destaca el Preludio. El recorrido por el lugar incluye la visita a la zona de los viñedos, a las bodegas y la cava subterránea.
La Bodega Bouza Boutique cuenta con una colección de autos antiguos y un casco de marcado estilo colonial. Ideal para los amantes de estas dos pasiones.
via: pordescubrir.com
Las bodegas nos invitan a realizar los clásicos recorridos entre barricas, toneles y viñedos con la degustación final. A pesar de ser una ruta nueva ya le valió el reconocimiento del suplemento Viajes de The New York Times.
Las bodegas que podemos visitar se abocaron a la creación de vinos de gran calidad, y se han convertido en referentes internacionales. La mayoría de ellas exporta a Brasil, Estados Unidos y Canadá.
La tanta al principio no es una ceta fácil de obtener, por la estructura con la que cuenta puede ser considerada una uva versátil que permite producir vinos jóvenes, de guarda y hasta licores como el Oporto.
En Uruguay existen 268 bodegas, la mayoría pequeñas y con una importante tradición familiar. Todas ellas se encuentran atendidas por su dueños de años de campo, concentradas es las cercanías de Montevideo y Canelones, pero también a lo largo del río Uruguay, en Colonia y en Rocha. Si bien es cierto que aun no se encuentran muy influenciadas por lo que al marketing se refiere poco a poco se van desestructurando. Un claro ejemplo de ello es la Bodega Irurtia en Carmelo, ella se encarga de recibir a los turistas con gran esmero. Les gusta darles la posibilidad a los visitantes de conocer el lugar.
Por su parte, Juanico, en Canelones es una de las bodegas líderes. Entre sus producciones se destaca el Preludio. El recorrido por el lugar incluye la visita a la zona de los viñedos, a las bodegas y la cava subterránea.
La Bodega Bouza Boutique cuenta con una colección de autos antiguos y un casco de marcado estilo colonial. Ideal para los amantes de estas dos pasiones.
via: pordescubrir.com
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